MARIONETAS DE UN DÉSPOTA II

Aunque me acaba de venir a la memoria una singular canción, que digo canción, superéxito que cantó nuestro alcalde en las últimas elecciones municipales –creo que el sarcasmo es transparente, ya que no es más que ruido a los ojos de Leonardo Dantés (desde aquí pido perdón a Leonardo Dantés por compararlo de algún modo con nuestro alcalde)-. ¿Cómo se puede llegar a ese nivel de vejación personal, estupidez moral y desfachatez política? Se puede reprochar un plan político de medio pelo, una campaña política desprovista de ideas frescas o cierta carencia de unión política, pero como se puede permitir impunemente que un alcalde insulte deliberadamente a un rival político, hablo de un acto que va más allá de la política, insultó la credibilidad de una persona que al igual que yo, que tú y que todo ciudadano que ame su ciudad, daría cualquier cosa por Valladolid. Me parece vergonzoso, un acto deleznable y una acción bastarda. Pero el seguirá ahí, desde su fatua omnipotencia, encaramándose desde el pleno cada día consciente de que hay una ciudad a la que vilmente engaña y traiciona con sus actos.

Hasta ahora no he dicho su nombre, porque me reservaba un solo párrafo para su persona. Todos lo conocéis, unos más y otros menos. Allí por donde pasa su nombre crea un ambiente enrarecido. Apoyado por una mayoría chocheante, vividores del franquismo, hijos de alguien o simplemente incultos parafraseantes que no conocen la Historia y carecen de personalidad, lo que viene a significar: la población con edad de voto suficiente como para que salga elegido durante cuatro legislaturas, para nuestra desgracia. Nuestro alcalde se llama Francisco Javier León de la Riva, y es un ________ –que cada cual introduzca su calificativo favorito para describir a este déspota, pedante y pretencioso-.

Una vez se dijo que Valladolid era un lugar de putas y borrachos, que poco se equivocaban al describirnos así. Mal que nos pese no hemos cambiado un ápice, con o sin democracia, en monarquía, república o dictadura; seguimos siendo las mismas putas y los mismos borrachos lo que abarrotan cada fin de semana las calles, sólo que ahora por respeto, por vergüenza o para ocultar la verdad, eufemísticamente los despojos de mi ciudad se autodenominan pijos y patriotas que salvaran España – primera lección de humildad, el verdadero patriota no es aquel que con la mano abierta y apuntando al cielo cree solucionar los problemas-. La verdad es que estamos hasta el cuello de nuestra propia mierda y no es sino con el puño, el pico, la pala y el trabajo duro como haremos que esta ciudad progrese hasta lo que verdaderamente se merece. Hagamos callar y tachar de mentirosos de una vez y para siempre a quienes alguna vez se atrevieron a decir algo malo de nuestra ciudad. ¡Demostradme que estoy equivocado! Creed en lo que os digo: allí afuera, en nuestro futuro, hay un Valladolid mejor, un Valladolid que ansía dar a luz, un Valladolid que construiremos con nuestras propias manos, porque nosotros somos el verdadero futuro de esta ciudad, en verdad os digo que es lo mejor para todos.

No pretendo que me aplaudan o me abucheen por lo que acabo de escribir. Sólo describo la podrida verdad a la que tengo que enfrentarme cada vez que veo a un vallisoletano a la cara. Sólo relato lo que estoy saciado de aguantar. Tengo dieciocho años y veo más allá de lo que un grupo de políticos cretácicos verán jamás y que creen conocer está ciudad, veo más allá de diferencias políticas, veo más allá de ideologías y veo más allá de personas. Lo que yo veo es una ciudad que está pidiendo a gritos que la salven, y cuando la dama de mis amores pide auxilio, discúlpenme, pero yo no puedo apartar la mirada a otro lado.

Siempre rojo y a la izquierda, Mateo Azorín.

3 parladas:

Unknown dijo...

Cuenta conmigo

Anónimo dijo...

Vamos a ver... como puedes terminar este artículo diciendo que ves mas allá de idelogías políticas después del varapalo que das contra los fascistas? espero que me respondas

Unknown dijo...

Lo cortés no quita lo valiente... ver más allá de tus propias narices no significa q no sepas si tienes mocos